UN CIERTO SILENCIO. ÁNGELES CASO.
DESDE HACE
TIEMPO, cada mañana, después de leer el periódico y escuchar algún informativo
en la radio, suelo caer durante un rato en un proceso depresivo. Imagino
que a todos ustedes les sucede algo parecido. Por muy bien que les vayan
las cosas a título individual, es imposible no verse afectado por todo lo que
nos rodea. Parece que nos hayan tirado encima un cubo entero de pintura sucia y
maloliente, emborronando el fresco más o menos decente que habíamos ido
haciendo entre todos.
Entre todos: al menos desde el siglo XVIII y el extraordinario
proceso de la ilustración, han sido muchas las generaciones, infinitos los
hombres y las mujeres que han batallado y se han dejado la libertad y hasta la
vida por construir un mundo mejor. Una sociedad de la que habían ido
desapareciento lentamente las masas de los desheredados,